Ochenta y ocho horas después de que un dígito cambiara en nuestro calendario, estoy sentada escribiendo este primer post del año. Ha habido más de una razón para el hecho de no plasmar ninguna palabra en este rincón pero la principal ha sido la pereza.
Cuando tenía quince días de vacaciones en el entrenamiento me ocurría algo parecido. El primer día de vuelta a la rutina el simple hecho de dar un paso me suponía una pereza física con la que me tenía que pelear mentalmente para abandonar. Sólo me duraba hasta que recorría los cinco minutos que separaban mi casa del gimnasio; pero la determinación de coger la bolsa deportiva surgía de mi cerebro, pues mi cuerpo no estaba de acuerdo conmigo. Una vez en el tatami se me olvidaba todo y generaba la adrenalina que mi cuerpo había estado guardando durante esos días de reposo. Acabado el entrenamiento, duchada y de vuelta a casa, en lo único que pensaba era en volver al día siguiente a practicar y a desahogarme y por supuesto que de la pereza ya no sabía ni su significado.
En cambio la pereza mental, cómo la combato? si desde el mismo cerebro ya están haciendo huelga, es complicado ordenarle nada; básicamente porque las ordenes salen de la misma parte del cuerpo y eso se traduce en la pescadilla que se muerde la cola. Estoy rompiendo ese círculo vicioso y veremos lo que me depara este año en cuanto a textos imaginados, pensados, inspirados, escritos y elegidos por mí para quedar impresos en este compartimento de la tecnología actual.
En cuanto al libro, sólo me he leido un par de páginas pero todo tiene su explicación. Me ha gustado el inicio y, comparándolo con un buen vino, he de paladear cada sorbo que las palabras al ser leídas, producen en mí pues nada es eterno y a cada gota-silaba le debo dar la importancia que se merece...
Cuando tenía quince días de vacaciones en el entrenamiento me ocurría algo parecido. El primer día de vuelta a la rutina el simple hecho de dar un paso me suponía una pereza física con la que me tenía que pelear mentalmente para abandonar. Sólo me duraba hasta que recorría los cinco minutos que separaban mi casa del gimnasio; pero la determinación de coger la bolsa deportiva surgía de mi cerebro, pues mi cuerpo no estaba de acuerdo conmigo. Una vez en el tatami se me olvidaba todo y generaba la adrenalina que mi cuerpo había estado guardando durante esos días de reposo. Acabado el entrenamiento, duchada y de vuelta a casa, en lo único que pensaba era en volver al día siguiente a practicar y a desahogarme y por supuesto que de la pereza ya no sabía ni su significado.
En cambio la pereza mental, cómo la combato? si desde el mismo cerebro ya están haciendo huelga, es complicado ordenarle nada; básicamente porque las ordenes salen de la misma parte del cuerpo y eso se traduce en la pescadilla que se muerde la cola. Estoy rompiendo ese círculo vicioso y veremos lo que me depara este año en cuanto a textos imaginados, pensados, inspirados, escritos y elegidos por mí para quedar impresos en este compartimento de la tecnología actual.
En cuanto al libro, sólo me he leido un par de páginas pero todo tiene su explicación. Me ha gustado el inicio y, comparándolo con un buen vino, he de paladear cada sorbo que las palabras al ser leídas, producen en mí pues nada es eterno y a cada gota-silaba le debo dar la importancia que se merece...
16 comentarios:
Solo es custión de volver a pillar el ritmo y desperezar a tu cerebro. Estoy convencida de que este año nos brindarás con nuevos post "magistrales".
Mientras tanto, saborea cada una de sus palabras y empapate bien de ellas.
¡¡Feliz primera entrada del año!! :p
Y que tu cabecita de para muchos textos lindos de leer!! :)
Besos
Contenta, gracias jajajajajaja. La pereza mental es lo peor yo ahora no estoy en ese momento pero suelo tenerla. Hay veces que mi cerebro dice palabras desordenadas que no tengo ganas de colocar y otras veces ni eso, ni siquiera tengo ganas de pensar.
Después de darle un descanso a tu cabecita, te ayudaremos a dejar la pereza atrás.
NH
feliz año eh, paladea eh, que los buenos libros hay que disfrutarlos, envidia me das
besos
Por cierto mi auto regalo de Reyes este año es el "Ocho" me picó la curiosidad
"Excusamos nuestra pereza so pretexto de la dificultad"
_Quintiliano_
S.C
a mí me pasa eso mismo cuando suena el despertador para ir al gimnasio... me subo a la elíptica aún con legañas... pero cuando me voy a la ducha me siento tan bien... que deseo que llegue el día siguiente para volver a hacere deporte ;)
besiños de año nuevo
uf, la pereza mental cuesta combatirla, es casi peor q la fisica!
feliz año
feliz año niña!!
bsos.
Seguro que la pereza se te pasa pronto, todo es acostumbrarse y por supuesto que seguirias escribiendo muchos posssssssssstttttttttttt bonitos!!!
Muak y feliz año!
A mi el simple hecho d coger la bolsa d deporte ya me hace liberar endorfinas y luego en la tarima... el extasis... asi q te entiendo. Pero alli mi mente se libera tanto o mas q el cuerpo, me desengrasa y desconecta d todo... absolutamente todo...
Besos y mucha lucha contra esa pereza mental
La pereza física por supuesto que es fácil de superar... Te tienes a ti misma detrás gritando que hay que moverse... La psicológica... A veces aparece porque es necesario desconectar un poco. No te martirices... Pero si ves que en un mes sigues igual... Entonces malo... Empieza a buscar el motivo que te mantiene así y erradícalo...
Por cierto... ¿Tatami? ¿Puedo preguntar qué deporte?
Biquiños.
cómo que pereza mental?? :) la verdad es que es difícil superar pero me alegro que hayas escrito de nuevo, eh!! y este año nos deparará muchos buenos momentos a través de esta tecnología, estoy segura de ello. Un beso nada perezoso :)
M: Un, dos, un, dos, un, dos... ritmo no?...jajajajajjajjj...
Kibo: Ya escribiré yo para que tengas una distracción... Besillo
NH: Ya me ayudas, ya... Si te gusta la novela histórica te gustará el libro. Beso alegre
Guada: Que tu año sea igual de feliz que el final del último... Besos
Anónimo S.C.: Este Quintiliano cuánta razón lleva...
Helen: Ya veo yo los resultados de tanta elíptica... Bicos
Una más: Sip, definitivamente es mucho peor... Un beso y que tu año siga yendo para arriba...
Labrujamala: Feliz!!! Beso (empezaré por uno que hemos cambiado de año...)
Sinres: Todo se pasa y esta situación ya está casi finiquitada... Besote y feliz año.
Saritísima: Voy ganando la lucha...jejejejjj... Besis
Any: Un mes?... ni tres días, yo soy así...
Puedes preguntar o preguntas?...jejejejjj... Niña la respuesta es judo.
Besos
Jelly: Jo, ya veo que no me puedo quejar de ná...jejejejejj... Bicos Ginebrilla...
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