domingo, 28 de junio de 2009

De dónde vienes? Manzanas traigo...

Así exactamente es como me sentí ayer después de una conversación que, en principio, iba a ser bien interesante. Por lo menos eso era lo que yo consideraba, analizándola tranquilamente, llevando a cabo argumentos sin posibilidad de reclamo. Retrasando y retrasando el momento de hablar pues cuanto menos tiempo tuvieran de darle vueltas a la cabeza sería mucho mejor para mí.

Como algo de experiencia tenía en estos temas, sabría de la reacción y mi estrategia se basaría en contrarréplicas a los puntos y comas que se dirían. La verdad es que me daba igual lo que me fueran a decir porque haría lo que tenía en mente, sí ó sí, desde hace un par de meses pero no es agradable tener que pasar por esta situación.

Llegó el día y rumbo a casa a celebrar el cumpleaños del jefe con la familia y de paso, a comentarle una "cosita" de nada... Aparco y sale Despistado de casa con el enano. Éste todo cojo porque cuando llega el verano le toca siempre que se le meta una espiga entre dedo y dedo y aún así se quería subir en el coche sin siquiera terminar de parar. Empieza bien la cosa, primero se lo cuento a él y luego cuando suba el jefe ya seremos dos para hablarle. Su reacción fue, más ó menos, lo que me esperaba pero ahí se quedó todo.

Le oye llegar mi hermano y viene a la habitación para decirme: "ahí está, venga, cuéntale, cuéntale" y todo esto con una sonrisita en la cara. Pero que hermano tan simpático que tengo... Salgo a la cocina y... "oye, que te tengo que contar algo..."..."que me voy a por un vaso de agua" (eufemismo para no escribir a dónde me voy realmente) y su reacción? Mmm, vale, si tienes sed, pues vete a por el vaso de agua. Darse la vuelta e irse.

Ni preguntas de cómo será el agua, de quién me lo va a dar, de cómo es el vaso, de cuándo será, ni nada de nada. En fin, casi habría preferido que hubiera dado batalla porque te quedas con ganas de que suceda algo, tanto tiempo esperando para que luego vaya a ser así...

Por la tarde visita a mi madre para llevarle unas flores y ver cómo lo habían dejado todo, rezarle, hablar un poco con ella y pensar que ahora la echas mucho más de menos que cuando se fue. Y como el día fue un revuelto de emociones, la noche no iba a defraudar. Soñé con ella. Sus labios diciéndome "Te quiero", yo respondiéndole "Te quiero" y ella pidiéndome que la abrazara que todavía no se había ido...

Empieza la cuenta atrás...

6 comentarios:

cris dijo...

Ya te digo, no te queda ná!
Un besote mu grande niña, y tranquila, que no siempre nos dicen lo que esperamos, pero son los nervios...

Saltinbanqui dijo...

Todo bien?

Ave dijo...

Lo de las manzanas me recordó a un chiste (un poco guarrete, cierto).

Ya te lo contaré ;-)

^lunatika que entiende^ dijo...

Yo me he perdido con lo del vaso de agua... pero es que estoy de un espeso también...

Anubis dijo...

Cris: Vecina, hoy han comenzado los nervios...aissss

Saltin: Muy bien niña, pero cuando piensas que va a haber "guerra" te quedas un poco ploff si no llega a suceder...

Ave: Tú contando chistes guarretes???? Mmmm...tu imagen se va a la porra, que lo sepas!!...jajajaj

Lunatika: Jum, explicaciones para que puedas encontrarme: me voy de casa y a otra ciudad que está pelín lejos..ejem,ejem.. y no sabía cómo se lo iba a tomar el jefe.

wildwildreally dijo...

cambias de ciudad mmmmm sé a dónde?? por casualidad no será... mmm playa hay... podemos jugar al voleibol... culos no sé... y sí, escribí este después de leer el posterior post que escribiste :)