El día había comenzado como otro cualquiera, la temperatura exterior era de -6º y hacía sol. Después de desayunar procedí a darme un paseo con el perro; ambos necesitabamos estirar las piernas y disfrutar de los paisajes nevados. Andamos, corrimos, jugamos hasta que nuestros cuerpos dijeron basta. Al volver a casa la rutina habitual de abrir el buzón esperando que estuviera vacio ó que hubiera alguna factura del teléfono ó de la luz. Pero esa vez una carta reposaba en el fondo, su blanco inmaculado atraía a mis ojos y me invitaba a cogerla.
Mi mano se acercó y los dedos se posaron en ella para sujetarla y agarrándola la saqué. Miré y vi que aunque la dirección era correcta se habían equivocado de destinatario; dándole la vuelta observé el remitente, un nombre: Miriam. La duda se aposentó en mi cabeza: tiraba la carta a la basura? y si era importante? En estos tiempos es extraño que te comuniques de esta forma cuando lo más fácil, sencillo y cómodo es usar el teléfono ó internet. Decidí abrirla, después de leerla ya vería que medidas adoptaría. Se trataban de tres folios escritos por una cara y con una letra bonita. El resumen de lo que decía? Le escribía a su ex describiéndole cuales eran sus sentimientos y el profundo dolor que sentía por la doble traición: se había ido con otra y le había robado la posibilidad de volver a confiar en otra persona.
No podía dejar de hacer algo. Esa carta nunca le llegaría a la destinataria pues yo desconocía su paradero pero quizás, quizás... yo si podía actuar. Una idea germinó en mi mente y subiendo las escaleras hacia mi casa fui trazando el plan a seguir. Entré y dirigiéndome a la habitación me senté delante del escritorio, comencé a escribirle relatándole lo sucedido y, aún siendo una persona extraña para ella, dándole un par de consejos tratando de animarle a seguir con su vida.
Pasaron los días, la carta quedó en el olvido hasta que otra mañana de invierno igual que la de aquel día me llegó su respuesta. Me agradecía el que le hubiera contestado y las palabras que le escribí; continuaba explicándome la relación fallida por la que acababa de pasar y que con mi carta, se sintió bien por primera vez desde hacia mucho tiempo ya que siendo una desconocida había conseguido, a través de ella, hacerle recapacitar y ver su vida desde un punto de vista diferente.
Mantuvimos una relación epistolar durante un par de meses, consiguiendo que nuestros buzones se llenaran todos los días de una carta e incluso, a veces, de dos ó tres. Cada vez nos contabamos más cosas, nos sentíamos más a gusto describiendo nuestros pensamientos y sentimientos a esa "desconocida" que esperaba al otro lado de la hoja desgranar cada palabra, cada frase escrita por la otra persona. Y sucedió lo inevitable: quedamos un sábado por la tarde en un bar concreto, a una hora exacta.
Llegué con diez minutos de antelación, los nervios no aparecieron ó si? porque claro, eso que sentías en el estómago sería sed, hambre... Me senté en la mesa a esperar y pedí un café; observaba a la gente en la sala, personas amigas que pasaban un buen rato, hablando, charlando, disfrutando de ese día de asueto en sus vidas. Se abrió la puerta y entró una chica morena de pelo corto y ojos marrones. Sería ella? No nos habiamos visto nunca ni tampoco enviado fotos; la imagen era una incógnita para nosotras pero, sí, algo me decía que era ella.
Me miró, le hice una señal y acercándose una sonrisa se empezó a formar en mi cara. Se sentó y comenzamos a hablar, sabíamos tanto y tan poco de nosotras que era como comenzar de nuevo. La única diferencia es que había sentimientos de por medio y que ambas los conocíamos...
El día que recibí tu carta no sabía lo que el futuro me depararía pero es una fecha que la tengo grabada en mi mente y algún día te la recordaré...
Mi mano se acercó y los dedos se posaron en ella para sujetarla y agarrándola la saqué. Miré y vi que aunque la dirección era correcta se habían equivocado de destinatario; dándole la vuelta observé el remitente, un nombre: Miriam. La duda se aposentó en mi cabeza: tiraba la carta a la basura? y si era importante? En estos tiempos es extraño que te comuniques de esta forma cuando lo más fácil, sencillo y cómodo es usar el teléfono ó internet. Decidí abrirla, después de leerla ya vería que medidas adoptaría. Se trataban de tres folios escritos por una cara y con una letra bonita. El resumen de lo que decía? Le escribía a su ex describiéndole cuales eran sus sentimientos y el profundo dolor que sentía por la doble traición: se había ido con otra y le había robado la posibilidad de volver a confiar en otra persona.
No podía dejar de hacer algo. Esa carta nunca le llegaría a la destinataria pues yo desconocía su paradero pero quizás, quizás... yo si podía actuar. Una idea germinó en mi mente y subiendo las escaleras hacia mi casa fui trazando el plan a seguir. Entré y dirigiéndome a la habitación me senté delante del escritorio, comencé a escribirle relatándole lo sucedido y, aún siendo una persona extraña para ella, dándole un par de consejos tratando de animarle a seguir con su vida.
Pasaron los días, la carta quedó en el olvido hasta que otra mañana de invierno igual que la de aquel día me llegó su respuesta. Me agradecía el que le hubiera contestado y las palabras que le escribí; continuaba explicándome la relación fallida por la que acababa de pasar y que con mi carta, se sintió bien por primera vez desde hacia mucho tiempo ya que siendo una desconocida había conseguido, a través de ella, hacerle recapacitar y ver su vida desde un punto de vista diferente.
Mantuvimos una relación epistolar durante un par de meses, consiguiendo que nuestros buzones se llenaran todos los días de una carta e incluso, a veces, de dos ó tres. Cada vez nos contabamos más cosas, nos sentíamos más a gusto describiendo nuestros pensamientos y sentimientos a esa "desconocida" que esperaba al otro lado de la hoja desgranar cada palabra, cada frase escrita por la otra persona. Y sucedió lo inevitable: quedamos un sábado por la tarde en un bar concreto, a una hora exacta.
Llegué con diez minutos de antelación, los nervios no aparecieron ó si? porque claro, eso que sentías en el estómago sería sed, hambre... Me senté en la mesa a esperar y pedí un café; observaba a la gente en la sala, personas amigas que pasaban un buen rato, hablando, charlando, disfrutando de ese día de asueto en sus vidas. Se abrió la puerta y entró una chica morena de pelo corto y ojos marrones. Sería ella? No nos habiamos visto nunca ni tampoco enviado fotos; la imagen era una incógnita para nosotras pero, sí, algo me decía que era ella.
Me miró, le hice una señal y acercándose una sonrisa se empezó a formar en mi cara. Se sentó y comenzamos a hablar, sabíamos tanto y tan poco de nosotras que era como comenzar de nuevo. La única diferencia es que había sentimientos de por medio y que ambas los conocíamos...
El día que recibí tu carta no sabía lo que el futuro me depararía pero es una fecha que la tengo grabada en mi mente y algún día te la recordaré...
18 comentarios:
Ohhhhh...
Simplemente eso... No tengo más palabras...
...
Biquiños...
Guauuuuuuu que lindo!!!!!!
Un beso bollycao!!
jajajjaj
Me has descolocado, precioso.
Besos
...con el corazón encogido y una gran sonrisa me dejas.
Me gusta como describes, me haces sentir sumergida en una novela o viendo un película. :)
Besos!
Preciosa historia
QUe fuerte! Cada díoa me convenzo más de que el destino nos tiene muy apretados! ejjee
Besitosss!
precioso, me ha encantado, ojalá ocurrieran cosas asi mas a menudo
besos
ala, qué guay!!! yo nunca se me hubiese ocurrido contestar, lo que me hubiese perdido ainsss
Si te digo q me gusta... me quedo corta..., muy corta :)
Besicos y más besicos!!
SUpongo que eso era así antes de la era internet... ahora las cosas son más fáciles, pero menos pausadas y meditadas... Todo tiene ventajas e inconvenientes... Cömo la via misma jajaj
Pensaba que cosas así sólo ocurrían en las películas....
http://www.youtube.com/watch?v=CGfMzhVA7MQ
Un besazo
Qué bonito ¿no?
besiños
Jooooder Anubis, neeena, me ha encantado la historia... es maravillosa, caprichoso azar de la vida verdad? y estas cosas suceden, nos puede suceder a cualquiera, un beso enorme nena y ya hablamos que.... quiero saber mas!!!!!
Ummm, la historia..bonita....y no diré más que tus posts son cifrados y...
Yo conversaba con alguien y nunca nos conocimos, es como tu dices, sabemos tanto y tan poco.
Un beso.
Any: Contigo si que me quedo yo sin palabras....
Anónimo: Así que te gustan los bollycaos no?...jejejjejejjj..
NH: Me gusta que te sintieras asi... Besos
Kibo: Lo intentaré de nuevo, no lo dudes. Un beso
Tanais: Sin palabras... Besillos
Lylo: Yo siempre me fio de mi destino...
Guada: Ocurren pero no tenemos noticias de ellas.
Jelly: Claro que se te hubiera ocurrido!! Bico
Nono: Tendrás que decirme cuánto te gusta... Besico
Izel: Todo depende de si tú quieres que siga así ó busques los atajos de esta era nuestra.
M: En las peliculas y en la vida real...
Helen: Sip, así quería que fuera. Besiño
Arrítmica: Con las ganas te quedarás...jajajajaajjjj... Beso
Ripley: Pues eso...
Blau: Nunca terminamos de conocernos a nosotros mismos como para conocer a los demás. Beso
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