jueves, 26 de noviembre de 2009

Acepciones

Leo en un artículo que han detenido a una mujer por ser la autora de dos crímenes. A medida que lo voy leyendo se van desgranando los detalles de lo sucedido. Provocó la muerte de dos niños, hermano y hermana, de diferente modus operandi. A la niña de ocho años la engañó para que fuera con ella a casa y allí la mató, procediendo a meterla en una ánfora para enterrarla poco después. Al niño lo estranguló y lo tiró al rio. La familia siempre sospechó de ella pero por hache ó por be, jamás pasó un día de su vida en la carcel.

Ahora, al ir a construir viviendas, se han encontrado con el cuerpo de la niña y por fín, se le ha tomado declaración y confesando ella ambos crimenes. Han pasado cincuenta años, ha disfrutado de la vida, se vengó de la familia a través de los hijos y ahora es cuando se va a impartir justicia.

Lo que me atrajo principalmente de la noticia fue el titular del mismo. Una anciana había confesado el asesinato de dos niños. Seguí leyendo y lo que me sorprendió fue que la protagonista del suceso fuera una mujer de sesenta y ocho años.

A esa edad y se le califica como anciana? Yo no le pondría dicho calificativo pero me hizo recordar un experimento que se hizo en un trabajo donde se tenía que decir en cifras lo que suponía para cada uno lo que era poco, bastante, mucho, demasiado, nada, etc, etc...

El resultado fue curioso, nadie de las cincuenta personas coincidió y ello te lleva a pensar que lo que para mí es pasarse de la raya, para ti puede ser que ni siquiera haya traspasado la linea de salida.

2 comentarios:

Keka dijo...

A mí lo que me parece muy fuerte es que en este mundo haya tanta gente viviendo la vida sin pagar por sus crímenes... ¬¬

Un beso.

cris dijo...

Pues aquí estoy, esperando una llamada perdida... como no la hayas visto me da mal!! ajajajajajaj.