Impresiones

Desconozco el camino por el cual llegué a ese lugar en concreto, tenía varias alternativas y no es demasiado importante como para tratar de recordar su recorrido. Fui pasando de casa en casa y de rincón en rincón hasta dar con su plaza.

Creo que no llegué a la tercera frase cuando todas mis alarmas saltaron. Empezaron a sonar, cada pitido más alto y con más fuerza: hay gato encerrado, hay gato encerrado.... Volví a empezar pero ya poniéndole toda la atención, estando atenta a todas las pistas y sobretodo, a lo que mi instinto me decía.

Contaba una historia, la iba desarrollando paso a paso, dando todo tipo de detalles, hablando de las reacciones de las personas, pero era tan peliculera, tan increible que algo en mi cabecita me seguía insistiendo: no te lo creas, no cuadra. No estoy hablando de un dramón ni la trama era compleja ni complicada pero son ese tipo de sensaciones que resuenan en tu cabeza y no puedes dejar de tomar en cuenta ante lo que tienes delante de tus ojos.

En realidad no tiene ninguna importancia el hecho en sí de si era verdad ó mentira. Cada cual escribo lo que quiere, como quiere y lo que le da la gana. Aunque cuando te da la impresión de que quiere que el lector vea algo que no es y lo haga pasar por algo cierto es en el momento que lees para saber hasta dónde, cómo, cuándo y cual será el final de todo.

Por qué sigo leyendo si tengo la idea de que es todo mentira? Sencillamente porque quiero saber hasta dónde llegará su imaginación ó su "copia y pego" (que es otra posibilidad que también entra dentro de lo posible), porque me lleva un minuto hacerlo y me sirve para desconectar del día a día.