martes, 9 de febrero de 2010

El pasado y sus pruebas

Te dedicas a revolver en el armario buscando aquel objeto que mentalmente siempre ha estado colocado en un lugar pero que ahora, misterios de la naturaleza, no aparece por ninguna parte. Mueves libros, cajas, maletines, sobres, folios, papeles para aquí y para allá y tus dedos se quedan pegados en un sobre en particular.

Sobre amarillo, típico que te daban cuando ibas a revelar unas fotos. Lo abres y con un simple vistazo del primer esbozo de la fotografía que aparece en primer plano ya recuerdas y reconoces de dónde son y sobretodo porqué están en ese lugar y no guardadas en algún sitio más propicio para las mismas.

Han pasado nueve años y medio, no te llega la memoria para conocer cuándo les distes un vistazo por última vez ni ganas. En su momento, hubo un conglomerado de sentimientos pero ahora mismo lo único que te producen es curiosidad. Vas pasando una tras otra y haciéndote pensar en qué momento fueron hechas y qué se supone que pasaba por tu cabeza.

Te das cuenta de muchas cosas, ahora lo ves tan claro que no llegas a comprender porqué en aquel momento ni se te pasaba por la imaginación: qué poco te conocías y qué poco parece que te conocían los demás. Por suerte, aparece una foto de "Elegante", mira por dónde y yo buscando un recuerdo suyo desde hace tiempo; lo que llegué a quererle y lo que lloré cuando le tuvimos que poner la inyección ya que algún desgraciado nos lo envenenó y él luchó pero el veneno lo mataba poco a poco. Más suerte si cabe, es tener una foto de mi madre, justo en un momento en el cual siempre la recordaré: de noche, sentada en el sofá, pasando un rato en familia, uno de tantos pero que ahora tienen un significado bien especial.

Y fotos mías, claro está, pero una en especial: esa soy yo? Casi ni me reconozco. Me gusta la persona que veo retratada en ese instante. Pelo corto, gafas de sol, sonrisa y la sensación de estar a gusto conmigo misma. Me alegra verme: si, esa persona he sido yo, y creo que estoy volviendo a ser ella. Habrá pasado por experiencias positivas y negativas, habrá aprendido de lo bueno y de lo malo pero esa persona, ésa, es la que está volviendo a salir y la que ni se imaginaba como iba a ser su vida diez años después.

3 comentarios:

MI HISTORIA... dijo...

Que siga saliendo, quiero conocerla :D

cris dijo...

Me hubiera gustado ver esa foto con el pelo corto... BOLLO!!! jajajjajajaj

iTxaro dijo...

sal sal que queremos conocerte

un achuchón