martes, 16 de marzo de 2010

Dieciseis de Marzo de Dos mil diez

Ya empezó, no pasó ni diez minutos y ahí estaba la primera muestra, la primera nota de aquello que será a partir del día de hoy el comienzo de la vida, mi vida:

"Para los que tienen el Conocimiento, una insinuación es más que suficiente."


Haji Bektash Veli

sábado, 13 de marzo de 2010

A pensar

Aprovechando que no es una entrevista y que es mucho más relajado hacerlo en casita, sentadita y con ganas de filosofar.. y a opinar se ha dicho que luego daré yo mi respuesta aunque desde ya puedo decir que coincideremos muy poco, por no decir nada.

"Una mujer joven y casada, se siente desatendida por su marido ya que este trabaja durante muchas horas en el trabajo, y tiene mucha falta de afecto. Un día en el que su marido está de viaje, se acuesta con otro hombre en su casa, que está al otro lado del río que separa la casa de la mujer y del amante. Por la mañana muy temprano, la mujer quiere volver a casa antes que su marido. Para poder hacerlo, tiene que cruzar un puente, pero al principio de este hay un loco que no la deja pasar, puesto que si lo hace dice que la matará con un cuchillo que tiene en las manos. La mujer, recurre al barquero que se dedica a pasar con su barca a las personas de una orilla a otra. Cuando está en la barca, el barquero le pide el dinero, y esta le dice que no lleva nada, que por favor la cruce y luego se lo paga, que hay un loco en el puente. El barquero le dice no, que o le da el dinero por adelantado o nada. Entonces se dirige a casa de un amigo que vive en esa orilla del río, y que lo es desde hace muchos años, y está enamorado platónicamente de ella, y cuando la mujer le cuenta su problema, el supuesto amigo le niega la ayuda y el dinero porque dice estar decepcionado. Por último recurre al amante, el cual sin más le niega la ayuda y no le deja dinero. La mujer desperada cruza el río y el loco la mata.
¿Cuál de los personajes tiene más culpa de la muerte de la mujer?"

viernes, 12 de marzo de 2010

Hasta pronto, Don Miguel

"Hubo un silencio durante el cual se oyó, con breves intermitencias, el gotear del grifo en la pila. Al fin el viejo se arrancó y su voz brotaba como un chorro delgado pero firme y empezó a decir que los hombres creyeron que con meter el calor en un tubo habían resuelto el problema y en realidad no hicieron sino crearle porque era inconcebible un fuego sin humo y de esta manera la comunidad se había roto.

Su absorbente mirada enloquecida se clavaba pesada y contumaz en la muchacha, pero ella no experimentaba miedo ahora sino una pungente compasión y cuando el viejo la sujetó por el brazo crispadamente y la pidió a gritos que no le abandonase, ella, la chica, dijo serenamente:

- ¡Otra! ¿Habló alguien de marcharse?

Él añadió:

- Hija, ¿por qué no hemos de compartir lo poco que yo tengo?

La frente de la muchacha se plegó en una profunda, solitaria arruga horizontal. Dijo:

- ¿Puede saberse con qué se come eso, señorito?

Agregó el viejo como si no la oyera:

- Tendrás estorbo por poco tiempo, hija. A mí me ha salido ya la hoja roja en el librillo de papel de fumar.

Ella alzó los hombros aturdida:

- Como no se explique más claro...

Aún insistió el viejo:

- El día de mañana estos cuatro trastos serán para ti - y respiró fuerte.

Ella vaciló y, finalmente, tomó un vaso y lo apuró hasta el fondo. Al terminar, sus manos temblaban y en sus ojos obstusos se habia hecho repentinamente la luz. Puesta en pie, miró dócilmente al viejo, que también se había levantado, y sus ojos se llenaron de agua. Dijo apenas con un hilo de voz:

- Como usted mande, señorito."

jueves, 11 de marzo de 2010

Cinco, son cinco

Cinco deditos tiene la mano,
cinco deditos que bien lo he mirado
y diez deditos en las dos he sumado.
Pulgar se llama uno,
pulgar, pulgar
Índice, el segundo
y sirve para indicar,
aquí, allá, allí, allá.
Corazón en el tercero,
y en él se pone el dedal.
Los anillos en el cuarto
y le llaman anular.
Y al dedo chiquitín
le llaman meñiquín.

Desconocía la cancioncita para que los niños aprendieran cómo se llaman los dedos pero tras pasar cuarenta y cinco minutos de paseo y sentir como iban desapareciendo uno a uno de mi sensible mano, me ha venido a la cabeza la canción de "Cinco lobitos tiene la loba..." y ahí que me he visto adaptándola...jejejeje... En dicha excursión he podido comprobar la temperatura que hacía y era de cero grados centígrados es decir, ni frio ni calor pero puedo asegurar que parecía que anduvieramos a quince grados bajo cero.

Llego al hogar, dulce hogar y mi curiosidad innata consigue que me ponga a buscar la temperatura y ahí he podido ver que efectivamente, no me habian engañado pero lo que no sabía es que tenemos una humedad relativa del 93% y así andamos: con paraguas pues cae una mezcla de aguanieve y copos y como se dice por aqui "con tiempo fresco..."

miércoles, 10 de marzo de 2010

Todo Demonio llega a Tiempo

Si antes casi ni veía televisión y mucho menos aquellos canales patrios donde lo único que puedes aprender es a ser más idiota, tonto, inculto, sin educación y un deshecho con el que poder hacer lo que les diera la gana; ahora ya es la hecatombe.

Gracias a lo último que se han inventado y que intentan vendértelo como el summun del mundo actual, ya no puedo ver aquellas series que me interesaban en los canales extranjeros que sintonizaba por obra y milagro de la fibra óptica. Ni siquiera se puede sintonizar correctamente las birrias nacionales sin que te diga que hay mala señal, no hay señal ó como hace tan buen tiempo pues apechugarse tocan; por no hablar que, de repente parece que te estás quedando sorda y tienes que darle a la teclita del volumen ó que tu oido es un prodigio de la naturaleza y te has vuelto igual que Spiderman, incapaz de soportar esos decibelios demoníacos que retumban por toda la habitación.

Por supuesto que yo también tengo parte de culpa en mi boicot a la caja tonta y es que desde que estuve de vacaciones allende los mares, mi cabeza sólo asimila el escuchar las noticias, series, peliculas en el idioma de Shakespeare e incluso con subtítulos también en dicho idioma y así estoy ahora: leyendo bastante más de lo habitual, viendo televisión a través de internet y esperando hasta cierto punto que cambie la hora de invierno para salir a la calle con el solecito vespertino acariciándote la cara y riéndote de la última travesura del enano.

En fin, sé que debo dar las gracias por no estar esclavizada por dicho artilugio pero a veces las costumbres son las costumbres y lo que intentan vendernos como progreso, generalmente suelen ser una patata verde a la que le echan mucha salsa para que no se note el mal sabor que tiene y que fue cosechada antes de tiempo...

lunes, 8 de marzo de 2010

La cara colorada

O lo que es lo mismo: morirse de vergüenza. Lo que conlleva que suba un calor irremediable e inevitable por todo el cuerpo y haciendo que el rostro coja una tonalidad rosácea pasando del nivel menos notable con un ligero sonrojamiento de las mejillas hasta el mayor llevándote a comparar el rojo sangre con el color de tu semblante en ese momento.

Generalmente, las causas que provocan esta reacción suelen ser asuntos sin importancia que, una vez pensadas, pausadas y recapacitadas, vemos que no tienen razón de ser pero mientras tanto, el rato que se pasa es de agobio y timidez al extremo de desear que "se nos trague la tierra".

Lo que ya no me gusta tanto es que se sufra de vergüenza por cuestiones que no entran dentro de nuestro poder de decisión. Menos me gusta que las personas se rían de otras por el simple hecho de no haber tenido las mismas oportunidades, las mismas ocasiones para tener lo que ellas mismas tienen. No se paran a pensar que seguramente ellas también tendrán carencias y nadie se hace mofa de ello y convencida estoy que no les agradaría pasar por esa situación que están provocando en la persona objeto de su atención.

De todas formas, aqui la principal protagonista es la avergonzada. Considero que puedes tener ese sentimiento si, aún cuando has tenido la oportunidad, el momento y la ocasión, has perdido el tiempo y decidido que no valía la pena. Entonces, si ahora la gente se "ríe, sonríe y te señala" (algo que ni ellos mismos tienen derecho a hacer, sea dicho de paso), tu conciencia te hará darte cuenta de lo tonta que fuiste al desaprovechar lo que tenías al alcance de la mano. Ahora bien, si por motivos "x" tu vida transcurrió por otros derroteros, nunca jamás tengas vergüenza de lo que no tuviste oportunidad de hacer; levanta la cara, mírales a los ojos, sé confiada, siéntete orgullosa de ti y tu vida, nadie te ha regalado nada y nadie lo hará.

Estoy segura que tú, personita con sentimientos, corazón y alma, en cuanto tengas ese minuto y la ocasión te pondrás a ello y conseguirás aquello por lo que ahora la gente "inculta, ignorante y analfabeta" se rie de ti.

Todavía recuerdo a esa mujer que me encontré al subir al autobús en mi viaje al trabajo, donde me la quede mirando y me sonreí para mis adentros, valorando lo que estaba haciendo en ese momento y orgullosa de ver a personas que nunca tiran la toalla y es que aprender a leer pasados los sesenta y pico años y ver con qué ánimo, determinación e interés ponía en pronunciar cada palabra hizo que ese momento fuera de alegría y confianza en que si queremos, podemos.